viernes, 24 de abril de 2015

TREMBLING BLUE STARS: Sometimes I still feel the bruise

     Hay canciones que van inevitablemente unidas a recuerdos, y que de manera inexorable forman parte de ellos. Una melodía que sonaba de fondo en tu primer beso adolescente, otra para recordar un amor imposible, u otra que escuchabas una u otra vez en un acto puramente masoquista para flagelar tu primera herida en un corazón destrozado. Luego descubrirías que tu cuerpo será capaz de soportar las mucho más duras cornadas que te propinará la vida, y que tu corazón, como el de todos, coleccionará heridas bastante más profundas, pequeños tatuajes cortesía de lo que significa amar. Como decía, hay canciones unidas a recuerdos. Y también hay canciones que se dedican a rememorarlos. Parecen canciones hechas para tí y que irremediablemente te traen al presente algún momento de tu pasado. Puede sentirse el contacto real, la unión entre lo que sientes y lo que cantan, la universalidad del sentimiento. Una especia de "Hey, yo también he vivido eso" que alivia como un placebo las magulladuras.

     Lo bueno de este tipo de canciones que te atropellan y te catapultan al pasado, es que accedes al mismo dolor desde la prudencia de la distancia. El tiempo ha pasado. Ya no hay heridas, sólo cicatrices.



     Con un nombre tan Shakespeariano como Trembling Blue Stars, y discos con títulos como "Roto por los susurros" o "Labios con sabor a lágrimas", es sencillo adivinar, con qué nos vamos a encontrar. Pertenecientes a la "twee music", tan en boga a finales de los 80 y  toda la década de los 90 (Belle & Sebastian o Saint Etienne serían otros claros ejemplos, o en el ámbito nacional grupos como Las Aventuras de Kirlian o todo el denominado "Donosti Sound" con Family o La Buena Vida a la cabeza). Por supuesto no debemos confundir la Twee music con el "Tonti-Pop" de por ejemplo Los Fresones Rebeldes.

Por cierto, parece que los "hipsters" dejan de ser el modelo a seguir. En este mundo en el que nos zarandean de un movimiento a otro con la misma facilidad que el viento juega con las nubes, parece ser que un nuevo paradigma se nos viene encima. Ya no es cool ser hipster. Ahora hay que ser "twee". Ya no se llevan los barbudos (¿qué bien, eh Juan?). Ahora se llevan los jóvenes simpáticos, comprometidos, sensibles y nada engreídos. También admite a seguidores de cine o series de culto, o conocedores de las obras de los siempre geniales guionistas Neil Gaiman o Grant Morrison. 

Como siempre, a España llegará con retraso, pero al tiempo. Llegará.



      Curiosamente, una canción que habla de un amor roto, comienza con un "hola" tan inesperado como bienvenido. No hay adioses ni malos rollos, y a partir de ahí, no dejan de caer frases que son pequeñas obras de arte enmascaradas en un pop romántico y etéreo con el que Bob Wratten nos va describiendo su (nuestra) desintegración emocional.

Pero no esperes un melodrama con gritos desgarrados y violines mortecinos llenos de angustia. Toda la "saudade" de un corazón asediado que soporta y arrastra el peso de la derrota, es vestida con un cúmulo de armonías mágicas y trazos de pop exquisito con delicados arreglos, como ese palo de agua que toca el percusionista en el estribillo o la guitarra que surge como un susurro cuando canta que "a veces aún siente los moretones, las heridas", y que son medicina para el alma.


No hay despedidas, no hacen falta. No hay adioses, ese "hola" lo preside todo. A fin de cuentas todo acabó hace ya mucho tiempo. Es un hola que abre las puertas a tus recuerdos, sí, los tuyos, a tus emociones, las tuyas también, y aunque sepas que el cerebro siempre maquilla la memoria, cada frase es como un pequeño fantasma, que te sumerge un poco más en tu pasado, como ligeros besos bañados quizá en una luna llena de febrero, o en sus gatos blancos, su risa nerviosa, o las piedrecitas blancas de su jardín.

Y para el final de la canción, los últimos latigazos, los que más duelen. Todo está dicho, y nada puede cambiarlo. Ni un último amanecer privado antes de dar paso a la mañana, o su última imagen desde el retrovisor de tu coche. De nada sirve que alguien te tienda la mano, o pedir ayuda, a fin de cuentas, todos sabemos quién soñaba y quién era el sueño.

Este enlace, este tiempo, esta canción son para esa personita en la que estáis pensando mientras leéis esto, ese ser que dio sentido a vuestra vida durante un tiempo y en quien pensaréis mientras escuchéis la canción (por favor, poneos unos buenos auriculares para hacerlo). Y estas palabra son, por supuesto, para tí, amante de naufragios y de lunas, con un abrazo, tú ya sabes, infinito.





A VECES, TODAVÍA SIENTO LA HERIDA
Esto es sólo para decir "hola"
Y para hacerte saber
que pienso en ti de vez en cuando.
Sé que nunca nos llegamos a conocer del todo
pero a veces te echo de menos
y desearía que hubieras formado parte de mi vida

Mantener el contacto se hace muy difícil
a medida que el silencio crece,
Y no sólo por mí.
¿Quién de nosotros desearía que nos volviéramos a ver?
Cómo lamentaría que fuese un problema
La manera en que dejamos de estar unidos.

No me hago ninguna ilusión
en cuanto a lo que signifiqué para ti,
pero tu dejaste huella en mí.
Y a veces, todavía siento la herida
A veces, todavía siento la herida

De vez en cuando me tropiezo
con todo esto que he desplazado pero que no he perdido,
Un dolor que sentí hace tiempo
y que va apareciendo y desapareciendo
a lo largo de los años:
Me sorprendería si ahora aparecieses

Mantener el contacto se hace muy difícil
a medida que el silencio crece
¿Y por qué deberías pensar en mí
cuándo tú no eras la enamorada?
¿Cuándo tú no eras la soñadora?
¿Cuándo tú sólo eras el sueño?


SOMETIMES I STILL FEEL THE BRUISE
This is just to say "hello"
And to let you know
I think of you from time to time
I know I never really knew you
But somehow I miss you
And wish that you'd stayed in my life

Making contact gets harder
As the silence grows longer
And isn't it only me
Who'd like us to see each other?
How I would hate to be a bother
The way we left it was you'd ring

I'm under no illusion
As to what I meant to you
But you made an impression
And sometimes I still feel the bruise
Sometimes I still feel the bruise

Now and then I stumble on
What I've misplaced but never lost
An ache I first felt long ago
Though you've appeared and disappeared
Throughout these past few years
I'd be surprised if you now showed

Making contact gets harder
As the silence grows longer
And why would you think of me
When you were not the one in love?
When you were not the dreamer?
When you were just the dream?



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